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EL MILAGRO DE LOS BROTES VERDES
(Milagro nº 7 de San Genarín)
Por Raul González (Villanueva del Condado - León)

Los que somos, como yo,
Parranderos y poetas,
Escuchamos muchas cosas…
Es mucho lo que se cuenta…

Esta que vais a oír
Es la historia de un milagro,
El que hizo San Genarín
Con la ayuda del badajo.
………………………………………

Todas las noches de juerga
Al volver a su morada
Sin compañía y sin penas,
En una esquina meaba.

No era mear por mear,
Eran versos del que otorga,
Poesía con la minga,
Eran lágrimas de polla.

Lágrimas de rocío,
Que  su alma destilaba
Del orujo , del Picudo,
Del Mencía de crianza.

De esas esencias de vino
Iba naciendo un altar,
Que empezaba a fermentar
Con el invierno vencido.

Desde aquel tiempo en los Cubos,
Un mes antes de Cuaresma
Nacen unos brotes verdes
Al ventar la Primavera.

Cuando aparecen las flores
Fecunda su polen rosales,
hierbas, silvas y chopos,
a putas  y a concejales.

Se extiende por las esquinas,
Por bancos y reuniones,
y  va dejando en León
regalos y subvenciones.

Él nos dio los aeropuertos,
las escuelas de pilotos,
los circuitos de motos,
Presidentes de Gobierno…

Doce sueldos dio a Isabel,
Al viejo alcalde, lo suyo,
Y le dio a Emilio Gutiérrez
Todo el  salero del mundo.

Piensa la gente  que es Dios
Que da lo que merecemos…
La verdad la conocía
Francisco Pérez Herrero.

Paco fue quien me contó
Lo que yo os cuento ahora
Para que quede en memoria
Lo que Genarín pensó.

Dijo también que el Santo
Le contó  una profecía:
“Pasaremos malos años
Vendrán tiempos de sequía,

No habrá agua en los pantanos,
Se acabará la fortuna,
Nos joderán los mercados,
Cambiarán las partituras…

Y cuando llegue ese día
No os olvidéis de cantar,
De beber ni de pensar,
¡Que vida no hay más que una...!

Porque quiero que en mi tierra,
Cuando muera un leonés,
Que muera por lo que sea
Menos por tonto o de sed.



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