V CERTAMEN GENARIANO DE VERSOS BURLESCOS
A continuación se presenta un especial de todo lo relacionado con la convocatoria
del quinto certamen celebrado en 2015. Volver al índice de poemas DULCES QUIMERAS DE UN TRANSEÚNTE NOCTÍVAGO Por Nicolás Miñambres (León) En la ciudad de León, veintiocho de febrero, nuestras Marzas, tan leonesas, lucen belleza y salero. Un soplo de primavera, incipiente allá en el cielo, muestra sutiles, lejanos soplos semanasanteros. Para combatir la noche, para combatir el cierzo nada mejor que el orujo de Valdevimbre que, regio, le siembra a cualquier leonés hondos, legendarios sueños. La ciudad empieza a ser con el “líquido elemento” una ciudad transformada, distinta en cada momento. Huele ya a Semana Santa piensa el transeúnte, serio, y la Calle de los Cubos es aquí el mejor espejo que con gran pasión y encanto cantara Pérez Herrero. * * * Allí la noche discurre entre benditos desvelos, protegida por las piedras de la muralla y sus ecos; piedras en cuyos resquicios laicos milagros, eternos duermen allí agazapados con murciélagos inciertos. Pero orujo reiterado trae milagrosos efectos. El transeúnte camina en feliz desasosiego y a Paco Herrero se encuentra ¿O era del gran Paco un eco? Eco falso no ha de ser que Paco Herrero, sereno, en sus manos porta un libro que lee Fermín Carnero: “A la luz de un reverbero un borracho taciturno cuenta centenas de estrellas que están besando sus muros.” - Bello romance, pardiez-, dice con todo respeto el transeúnte, y pregunta en su etílico embeleso: - ¿Qué hacen por aquí a estas horas un Carnero y un Herrero? - Tomando notas, amigo, recuerdos de un tiempo viejo que ni revivir nosotros con claridad ya podemos. - Tanteando la política - observa Fermín Carnero-... Aunque bien, pienso ahora yo... no anda por nuestro pueblo. ¿Cómo la ves, transeúnte? Explícanos algo luego * * * El transeúnte, en el trance de ese apasionante encuentro, no sabe qué comentar, no sabe si vive un sueño: - Fermín, ¿dices tú que no ves bien el politiqueo? Seguro que tú has perdido aquel olfato tan recio que te dio aquella UGT, de políticos modelo. Si ves a los candidatos preparando el mamoneo que de inmediato tendrán... no podrías reconocerlos. Las flores que ahora ya empiezan a brotar en nuestros huertos no son tan bellas...¡qué va! como tan bellos son ellos. Y los pájaros que vuelan con primaveral denuedo no tienen ni parecido con su tan bello gorjeo. No hay rincón en la ciudad. ni en las plazas, ni en paseos donde esquivar puedas tú el íntimo regodeo de estos bichos aspirantes a ese laico solideo: el sentarse en la poltrona para...olvidar sus proyectos. -¿Y con la gente se tratan? - chupa la pipa Carnero – - Que si tratan? ¡Y retratan!, todo lo que ven que es bueno para engatusar el voto y llevarlo a su terreno - ¿Y saludan a la gente -pregunta Pérez Herrero- cuando caminan por este tan bello León, tan nuestro? -¿Que si saludan?, preguntas querido Pérez Herrero? Si te descuidas...te besan con ardor, los puñeteros. Es una emoción intensa, auténtico reverbero de cariños y de abrazos que ellos te dan impertérritos. -¡Coño, coño- dice Paco, ¡Cojones ¡– dice Carnero-, con lo poco que el cazurro se dio siempre al besuqueo. ¡Vaya!, qué cosas tan raras trajeron los tiempos nuevos! * * * -Amigo, tú, el transeúnte... el cazurro es tremebundo, mas nunca esa condición hubiera pensado uno, ni aunque político fuera... De eso estoy yo bien seguro. La niebla primaveral formó un bello claroscuro y el transeúnte, alelado, escuchó los versos, duros, de Paco Pérez Herrero, “Carretera de Los Cubos”: “Un sortilegio de ausencias evocan un viejo mundo que se fue con los aceros al hoyo de los sepulcros”. ............................... Y el transeúnte lloró solo, muy solo en lo oscuro, soñando con otras tierras... soñando con otros mundos. Volver al índice de poemas |
||||
COFRADÍA DE NUESTRO PADRE GENARÍN |
||||